“Sonríe si quieres dormir conmigo”: sonríe si quieres dormir conmigo.

“Eres tan hermosa que me hiciste olvidar mi línea de recogida”: eres tan hermosa que me hiciste olvidar mi cumplido.

Cuida tu habla no verbal.

Por supuesto, no se debe olvidar la importancia del habla no verbal, especialmente la mirada. Mirar a una persona cuando le agradeces, incluso cuando le das la mano si se presenta la oportunidad, es muy importante. A veces un abrazo es apropiado. Estos gestos a menudo significan más que cualquier cosa que puedas decir.

Si los elogios son un esfuerzo de colaboración, no olvides reconocer la contribución del equipo o de las personas cercanas a ti que suelen permanecer en la sombra. Mencionar a quienes te ayudaron, te inspiraron e incluso te apoyaron es una excelente manera de reconocer su valor para ti.

A.1 Cuándo usarlos

Este tipo de piropos parecen producir ciertos resultados solo para seducir a personas desinhibidas que buscan una aventura corta. Un conocido estudio encontró que funcionan mejor cuanto más extrovertida es la persona que recibe la frase.

Otros estudios también confirman que este es el tipo de frase menos valioso (especialmente entre las mujeres) porque se asocia con bajos niveles de inteligencia y honestidad.

“Eres muy bueno para tu edad”

Preguntar cuántos años tienes cuando tienes menos de 20 está bien, sobre todo para evitar problemas. Cuando tienes más, la pregunta se vuelve incómoda, especialmente si estás tratando de adivinar y poner más años de los que deberías. Si, por el contrario, apuestas menos y lo que intentas hacer es halagar cuando revelan tu verdadera edad, no lo eches a perder con “bueno, eres muy sexy para tu edad”.

La suposición de que el atractivo depende de la edad no es un buen comienzo. Ya; Ya sabemos que Brad Pitt y George Clooney también son muy sexys para su edad, pero puede que esta no sea la mejor línea para ligar con ellos.

¿Cómo responder a un buen comentario?

Solo di “gracias” Es así de simple. No es necesario fundamentar nada, no es necesario añadir nada. Alguien que te felicita espera que lo aceptes y te lo agradezcas. En la mayoría de los casos, no tiene que decir nada más para agradecer.

Sea lo suficientemente audaz para no dejar lugar a malentendidos, pero lo suficientemente velado e íntimo para permanecer elegante. Si tienes la oportunidad de iniciar una conversación, mira a la otra persona a los ojos e intercala con una mirada a través de su boca para volver a sus ojos.