Cuando hablamos y nos referimos a la crisis de pareja, lo primero que debemos hacer es comprender y profundizar en el verdadero significado de este concepto.

La palabra crisis significa “cambio inevitable”, por lo que no hay que tener miedo. Este es un cambio necesario y no tiene por qué tener connotaciones negativas.

Problemas de incompatibilidad con la pareja

Amarse no es suficiente para que una relación funcione. También deben ser compatibles. En otras palabras, deben complementarse bien. Esto no significa que tengas que compartir los mismos gustos u opiniones. Se refiere a llevar un estilo de vida similar y compartir planes básicos para el futuro. Por ejemplo, problemas elementales como las salidas nocturnas, la movilidad en el lugar de residencia y las ganas de tener hijos.

Quizás te preguntes por qué la pasión inicial se desvanece a medida que la relación avanza y los momentos de promiscuidad sexual se vuelven menos frecuentes. Mientras el afecto proteja la relación y gane la confianza, eso es normal. Sin embargo, las relaciones no sexuales por lo general no funcionan. Entonces, si no ha hecho el amor con su pareja durante mucho tiempo, es hora de cambiar las cosas y ver si su relación aún puede funcionar.

Conciliar trabajo y familia

Uno de los beneficios de tener una relación sana con tu pareja es el apoyo, y parte de ese apoyo se basa en la responsabilidad compartida. Una de las señales que pueden indicar que una relación no va bien es cuando reconoces o te das cuenta de que el mayor peso de la relación y todo lo que ello conlleva recae en ti, no en otra persona.

Por ejemplo, si te conviertes en una persona que está a cargo de todas las tareas del hogar, o una persona que se preocupa por todos los aspectos relacionados con la pareja, como el mantenimiento del hogar, la relación conyugal se deteriora de alguna manera.

Sin esfuerzo ni problema. Si se trata de tonterías, el individualismo de la pareja llevará a una disminución del contacto tanto físico como sexual… No hay contacto físico y mucho menos contacto sexual”, dice la experta. Irene López Assor, experta en psicología y autora de ’10 obstáculos para ser feliz’, revela algunas señales que debemos saber detectar para evitar que la ruptura que se avecina nos avergüence.

Contrariamente a la creencia popular, son los hombres, no las mujeres, quienes más sufren una ruptura afectiva. Este es el resultado de un nuevo estudio publicado en el Journal of Social and Personal Relations. Este estudio se basó en el primer análisis de big data de los problemas de relación.

Relaciones que usan la culpa

Hay una constante culpabilización de cosas en el pasado que parecen ser constantemente culpabilizadas. Hagas lo que hagas, no es suficiente para borrar los errores que cometiste hace mucho tiempo.

También eres siempre responsable de tus reclamos y sus molestias.