Como suele pasar en cualquier relación, todo parece perfecto, sobre todo cuando recién empiezas. Hay comprensión, comparten gustos comunes y, por supuesto, tienen muchos momentos románticos. Con todos esos hermosos momentos, llegas al punto de preguntarte. ¿He encontrado el amor de mi vida? Pero a medida que pasa el tiempo y comienzan a surgir problemas y conflictos entre la pareja, la pregunta se vuelve rápida de responder. En muchos casos, esta situación acabará por romper el vínculo existente y te darás cuenta de que ese hombre no es para ti.
Pero no te desesperes si no encuentras la respuesta a esa pregunta. Afortunadamente, existen señales que pueden indicar que has encontrado al hombre de tu vida, y lo creas o no, son señales muy fáciles de entender. Para comprender que ha encontrado su “media naranja”, simplemente preste atención. Luego, en algún momento, te darás cuenta de que se forma una conexión incomparable entre los dos. Aquí hay 9 señales para ayudarte a determinar si estás con la persona adecuada.
Cómo saber si alguien es el indicado en tu vida
Cuando estás enamorado, es natural preguntarse si la otra persona es “el indicado”. Esta es una pregunta que mucha gente se hace y no siempre es fácil de responder. A continuación te daremos algunos consejos para ayudarte a decidir si estás con la persona adecuada o si necesitas seguir buscando.
1. Considera lo que te dice tu instinto.
¿Cómo sabes si es el amor de tu vida? 15 signo
El amor puede manifestarse de tantas maneras que a veces cuesta reconocer si lo tenemos delante o si es sólo una ilusión. Así que a continuación te daremos algunas pistas para ayudarte a despejar tus dudas.
La comunicación activa es clave para relaciones sanas y duraderas. Significa ser capaz de escuchar lo que la otra persona piensa, siente, quiere y necesita a través de la empatía y la comprensión genuina. También significa saber cómo expresarse cortésmente, especialmente cuando no está de acuerdo.
Sabe respetar tu tiempo y tu privacidad. Respeta tu privacidad y no hace escenas haciendo planes que no lo involucran. Tampoco te presiona para que tomes decisiones para las que aún no está preparado.
Te conoce de pies a cabeza, pero eso no significa que te trate como a su mejor amigo. Él te abre las puertas, te trata con delicadeza y te presta atención cuando está contigo.
