Paradójicamente, en un mundo cada vez más conectado, a muchas personas les resulta cada vez más difícil hacer amigos. La amistad es el vínculo estrecho que se forma entre dos personas o un grupo. Esto suele basarse en emociones como el afecto, el respeto, la lealtad o la simpatía. Es una de las relaciones afectivas más importantes que uno puede tener, y por lo tanto es un elemento fundamental para desarrollar una vida plena y satisfactoria.

Por lo tanto, cuando una persona tiene dificultad para hacer amigos, su bienestar emocional se ve seriamente afectado. En estos casos, problemas como depresión, baja autoestima, miedo, etc. suelen aparecer. Por esta razón, es fundamental buscar formas de fortalecer las amistades.

Crees que el respeto es relativo

Todos los seres humanos merecen respeto. No importa si eres alto o bajo, feo o bonito, inteligente o disperso, rico o pobre, negro o blanco. Sin embargo, puede sentir que solo debe ser respetado si puede contribuir con algo, dar algo, hacer algo por alguien.

Es un error pensar que tienes que hacer algo para ganarte el respeto de los demás. Solo por ser humano, ya mereces respeto. Los animales y las plantas también lo merecen. Nadie tiene derecho a pisarte, aunque cometas errores o hagas algo inapropiado.

Qué hacer si sientes que tus amigos te ignoran

Como dije antes, no podemos influir en las preferencias de otra persona sobre con quién quiere estar. Sin embargo, y antes de rendirnos, hay algunas cosas que podemos hacer para intentar que esta amistad vuelva a ser lo que era.

En primer lugar, tienes que hacer un ejercicio de honestidad contigo mismo. El ejercicio es evaluar el grado de amistad que tienes con esta persona, y si la molestia que sientes por esa distancia es realmente porque es una persona que te gusta mucho… o es tu autoestima la que te molesta esa indiferencia porque de su rol

¿Por qué mi hija o mi hijo no tiene amigos?

En primer lugar, debemos intentar responder a esta pregunta. Para ello, es importante establecer una conversación con nuestros hijos donde podamos conocer las dificultades y consecuencias que experimentan en sus relaciones con los demás.

Si bien este problema puede ser difícil de resolver, ya sea por la confidencialidad que reclaman o por nuestro temor a su reacción, es importante que abordemos lo que nos puedan decir de manera flexible y abierta. Anteponer nuestras primeras reacciones a lo que nos dicen a una actitud comprensiva será clave para el éxito.

Primero conoce a tus vecinos

Esto puede sonarte americano, pero si descubres que tienes nuevos vecinos, es una buena idea venir a presentarte y saludarlos. Comenzarás dando una buena impresión y, con el tiempo, probablemente te inviten a tomar una copa en su apartamento.