A pesar de no siempre ser consultado, sentir dolor en el momento de la penetración durante las relaciones sexuales es un problema muy común y nunca debe considerarse normal. Puede afectar a mujeres de todas las edades y, aunque puede deberse a varios motivos, uno de los más comunes es una contracción involuntaria de los músculos del suelo pélvico. Esta contracción se denomina comúnmente vaginismo, y provoca el cierre parcial o total de la vagina, lo que, además del dolor, impide la penetración. En este post te explicamos cómo tratar este problema y qué otras causas pueden provocar dolor en el momento de la penetración.
- Vaginismo
Condiciones mucho más comunes
Pero hay otras condiciones que pueden durar años o toda la vida. Es esa percepción de que “el pene no entra”, “hay una pared”, “mi vagina es muy pequeña”… Esto se debe a que los músculos de la vagina se contraen involuntariamente impidiendo la penetración, por lo que todavía apreciar una pared. Esta contracción es inconsciente y, en la mayoría de los casos, la mujer no puede encontrar los músculos y, en consecuencia, relajarlos.
Las causas de este problema son múltiples y pueden complicarse, como una mala experiencia en el pasado, el miedo a quedar embarazada o una enfermedad. Podemos generalizar diciendo que estas mujeres sufren de una enorme ansiedad o miedo inconsciente a la penetración y esto les lleva a contraer la vagina para evitarla.
Molestias más frecuentes
Pero hay otras molestias que pueden durar años o toda la vida. Es esa percepción de que “el pene no entra”, “tiene una pared”, “mi vagina es demasiado pequeña”… Esto se debe a que los músculos de la vagina se contraen involuntariamente impidiendo la penetración, lo cual es por qué en realidad notan una pared. Esta contracción es inconsciente y, por lo general, la mujer no puede localizar la musculatura y, por tanto, relajarla.
Las causas de este problema son múltiples y pueden ser complejas, como una mala experiencia pasada, el miedo a quedar embarazada o el dolor. Podemos generalizar diciendo que estas mujeres sufren una gran ansiedad o miedo inconsciente a la penetración y esto les hace contraer la vagina para impedirlo.